FREELANCE - El Cliente, La Cotización y El Generalista.
En estos días que han pasado, estado pensando; en el trabajo
que realizamos como “Freelance”. Un trabajo autónomo, independiente; que
realizamos por cuenta propia, en cuestión de la profesión u oficio que
desempeñamos. La cual consiste en realizar trabajos, para terceros que
requieran nuestros servicios en determinadas tareas. Donde generalmente somos
retribuidos, no en el tiempo empleado, si no en el resultado obtenido.
Con esta pequeña introducción, quiero dar inicio a esto que
no es un artículo, ni una entrada; si no que es una historia, que contiene
experiencias mías, de amigos y colegas que hemos pasado por esto; de realizar
trabajos freelance. Cualquier parecido con la realidad, es mera coincidencia y
la historia comienza así….
Son las seis de la mañana, la luz de un nuevo amanecer,
deslumbra por mi ventana y un pequeño viento helado; entra por las rendijas. En
mis pensamientos digo — Hace mucho frió, para levantarme tan
temprano y no me ha llegado ningún mensaje.
De repente se escucha la alarma del despertador, yo hago
como si no hubiera escuchado nada; pero el sonido es persistente. De mala gana
extiendo mi brazo y con el tacto, busco el despertador. Entre más busco,
tocando la superficie de la mesita de noche, no lo encuentro….
Al final tuve que levantarme y apagar el bendito
despertador. En ese instante tocan a la puerta, son Yán y Alex; ellos son unos
colegas y amigos, y vamos a tener una reunión para hablar sobre nuestras
experiencias como Artistas Creativos (Diseñadores, Publicistas, Animadores 2D
&3D y Artistas Conceptuales).
Yán, mirándome de una manera algo molesto; me dice — ¡Recién
te despiertas!
Yo entre risas y un gesto amable; respondo — No
moleste, jajajaja…
Alex, solo se ríe y mirándonos, nos anuncia que Mery; le
llamo para decirle, que estaría llegando a las siete y media; como acordaron.
Frente a la ventana, dos gorriones cantan; mientras cada uno toma asiento, para
comenzar la reunión. Mery, con una sonrisa cálida y de forma alegre dice — Henos
aquí, nuevamente reunidos; después de 500 años.
Y todos nos miramos y nos reímos. Henoc le mira a Mery y le
dice — Ya
han pasado cinco años, sí que el tiempo pasa rápido. Así es, dice Alex y Yán, es el primero en sacar un portafolio, al cual
le sigue Alex, Mery y Henoc.
Yán, mirando uno de sus trabajos; dijo — Para este trabajo, un amigo mi contacto y me envió un
correo, donde me decía; que el cliente necesitaba unos render de
Infoarquitectura y como dato adicional y recomendación suya, QUE NO LE COBRE
MUY CARO; PARA QUE LA PRÓXIMA VEZ, ME CONTACTE DE NUEVO.
En esos días, yo
estaba iniciando recién en este medio, por así decirlo y no sabia mucho. Por lo
tanto, seguí su recomendación y no le cobre lo que debería cobrar, por un
trabajo así de infoarquitectura.
Fue así, que acepte y el cliente
se contactó conmigo y como ya es costumbre de los clientes, comenzó por
contarme, que los render los necesita para “AYER”.
Todos nos reímos y
decíamos, a todos nos ha pasado y nos sigue pasando. Yán, nos mira y con un
gesto algo serio en su rostro, dice — Todavía no
termino, como les decía; el cliente me mostro la calidad de render que estaba
buscando y yo le respondí; que me enviara los planos a mi correo, y que yo le enviaría
la cotización correspondiente y cuánto tiempo demoraría, el proyecto.
Es allí donde el cliente me dice,
Son pequeñas divisiones, donde pondrás unas sillas, muebles y una, que otro
objeto decorativo.
Y yo le dije, Esta bien, pero
necesito ver los planos y así podré dar le un buen precio. Pero el cliente
seguía insistiendo y diciendo, que el proyecto era pequeño y muy fácil de
hacer; que hasta él podría hacerlo, pero que no lo hacía, porque no tenía
tiempo.
Para colmo no podía ponerme tan
especial con los planos, también estaba económicamente mal y a eso le sumamos,
la presión del cliente. Al final acepte y lo que había pensado, para el
proyecto de ser un trabajo de unos 3 a 5 días, se convirtieron en dos largas
semanas, donde el cliente me pidió muchos cambios, y eran cambios algo tontos.
Alex, dice — ¿Qué tipo de cambios te pedían? Y Yán respondía — ¿Cambios cómo?, los muebles, muévelos un poco a la derecha;
porque tapa la decoración de la esquina. El escritorio, has lo más grande y yo
en mis pensamientos decía; pero si lo hago más grande no se va ver bien, aparte
de que es un escritorio personalizado; ósea que lo hice según las medidas que
ellos me an dado.
Así son los clientes, menciona Mery y Alex dice — Ellos mismos se contradicen.
Yán, para terminar; dice — Bueno o malo, este fue mi primer trabajo freelance y
aprendí mucho con este trabajo.
Mery, en su forma de ser tan expresiva y algo estrafalaria,
comienza diciendo — Ahora yo les voy a contar la
historia de la “CLIENTE LOCA” y todo comienza, después de tener una
conversación, vía celular; con mi madre y como todos ustedes saben, a
diferencia de mi papá, mi mamá es algo conservadora, como muchos dirían, a la
ANTIGUA.
Yán y Alex, dicen — No te vayas por las ramas, ve directo a la historia.
Mery, entre risas; sigue contándonos, sobre la cliente loca
— Jajajaja…jajaja…jaja…ja… No se desesperen chicos,
como les decía, termine de hablar con mi mamá y como a todos, nos ha sucedido,
me llego un correo, donde me solicitaban un trabajo de diseño publicitario.
Entonces les llame y después de dos intentos, me tomaron la llamada y conversando
un rato con ellos, me dicen; que han visto mis trabajos y que les gustaría, que
yo les realice el trabajo de publicidad. Yo les dije, que necesitaba, que me
enviaran todos los datos y referencias que tuvieran, como gráficos, imágenes,
videos, etc.
Así paso dos días y como a las
seis de la tarde, me llega un correo; con todos los datos que les solicite. Por
cortesía y respeto, les respondí, porque como ustedes saben, yo si soy muy
estricta con los tiempos; en eso si soy igual a mi madre.
Me pase como tres horas o más,
para hacer una buena cotización, donde tenía que ver los tiempos de trabajo;
con quienes iba a trabajar y todos eso. Como ellos querían unos gráficos, para
un cartel, tamaño gigantografía y en esos días, recién me estaba conociendo con
Henoc, y sabía que él hacia trabajos 3D, le mande un email; donde le solicitaba
unos precios, para arte conceptual, modelado 3d, rigging 3d y render.
Al día siguiente, en las primeras
horas de la mañana; envié la cotización e hice una llamada a la empresa, para
decirles que ya había enviado la cotización y que si tuvieran una consulta; yo
amablemente les respondería.
Ellos al final, me aceptaron la
cotización, solo me pidieron; que sea en menos tiempo y yo les decía, que, si
se hace eso, el trabajo no saldría como ellos quieren y que el costo del
proyecto subiría un veinticinco por ciento. Siendo así ellos aceptaron el
tiempo que les di en la cotización.
La primera etapa del proyecto se
hizo y con ello vino la primera reunión, a la cual fui sola, Allí conocí a la
jefa, así le llamaban en la empresa. Entre a un salón amplio, en la cual había
una mesa larga y muchas sillas alrededor, ya estaba allí el gerente, su asesor
de proyectos y la coordinadora de imagen empresarial. Salude amablemente a cada
uno y cuando estaba saludando a la coordinadora, ella dijo; Tu eres la experta
en diseño gráfico publicitario, yo le mire algo sorprendida e incómoda al mismo
tiempo.
En la reunión, me dijeron; que
ahora me comuniqué directamente, con la coordinadora, y yo dije perfecto. Fue
en ese momento que comenzó toda mi tragedia, porque esta mujer llamaba cada 3
horas; para saber ¿cómo iba el proyecto? Y yo le respondía, que se está
trabajando en los cambios y que demora, porque son gráficos grandes.
Cuando ya se había terminado de
hacer los cambios solicitados, se pidieron más cambios, pero esta vez era de
parte de la coordinadora, porque ella decía; que la iluminación no era la
correcta, que la pose del personaje; debería exagerarse más y cosas así. A
pesar que esos cambios que pedía, ya habían sido aprobados y confirmados. Y que
de nuevo llama, a las cuatro de la tarde, 8 de la noche y por ultimo a las doce
de la noche o las cero horas; de un nuevo día.
Alex mirando sorprendido, dice —
Y que preguntaba tanto, esa mujer.
Yan decía — Tanto así Mery, y que
es lo que quería.
Mery mirándolos, les sigue contando — La bendita coordinadora llamaba, para apresurar el trabajo.
Diciendo; No te olvides Mery, que tienes que enviarme a mi correo las nuevas
modificaciones y si es posible, llámame a mi celular. Yo le decía, que no se
preocupe, a la hora que le dije, que estaría listo los cambios, se lo enviaría
a su correo. Siendo así, amaneció y ya era sábado; todos nos alistamos para
enviar los cambios y salir del pequeño estudio, que había improvisado en mi
departamento. Como era costumbre, yo me quedé un poco más en mi departamento y
vi que me llego un mensaje a mi correo; lo leí rápidamente y me veo que, en el
mensaje, me reclaman porque había cambiado la iluminación y la pose del
personaje.
Yo estaba molesta y muy
fastidiada, lo que hice, fue adjuntar los mensajes y correos de la coordinadora
y enviárselos, como nota adicional. Les dije, que esos cambios los hice a
pedido de la coordinadora de imagen de la empresa y se van a decir algo; que se
lo digan a ella y también les dije, que no se preocupen, que la primera
propuesta y sus cambios, que me solicitaron, los había guardado.
Paso como una hora, desde que
envié el correo y de repente……. me llaman y yo nerviosísima. Respirando profundo y dándome ánimos,
conteste la llamada y era……. ¡Mi papá!
Todos gritan y dicen — Mery no
bromes así, nos dejaste en suspenso.
Yan algo sorprendido, dice — Ya
pues, cuenta ¿Quién era?
El que me había llamado, era el asesor de proyectos y me
dice; que les disculpe, que ellos no sabían que la coordinadora, había pedido
esos cambios, pero que esos cambios, no los quieren. Que el proyecto ya estaba
aprobado, con los cambios que ya habían pedido. También me llamo el gerente,
disculpándose. Porque su asesor de proyecto, le había contado, lo que había
sucedido y todo lo que había hecho para el proyecto.
Ya se imaginarán como estaba, feliz, porque el proyecto ya
había sido aprobado y ya no había mucho por hacer, por el proyecto. Al final se
terminó muy bien el trabajo, hubo una reunión más, para que me entreguen el
cincuenta por ciento restante y nuevamente me choque allí con la loca, yo le
salude amablemente; pero por dentro le dije…………. Ya se imaginan ustedes.
Alex sorprendido, dijo — Waoooo
¿todo eso te paso? Yo no aguantaría tantas llamadas.
Y todos nos reímos….
Alex, tomando una taza de café, nos cuenta su primera vez,
como freelance — Al contrario de ustedes dos, los
primeros trabajos que realice; como freelance, me los aprobaron a la primera y
era un cliente, a mi parecer; bueno. Pero después de cinco trabajos, se puso
algo especial y las cosas comenzaron a ponerse algo pesadas. Los cambios
comenzaron a llegar y eran muchos, a pesar de todo eso; yo seguí trabajando
para ese cliente.
De repente, me pide que realice un
trabajo de infoarquitectura, el trabajo se termina muy bien y sucede que el
cliente se desaparece o ya no responde a mis correos, ni las llamadas. Yo
estaba preocupadísimo, porque la renta se acercaba y no tenía mucha plata; para
completar el mes.
Un amigo me dice, si quieres te
acompaño; a la oficina de ese cliente tuyo y yo ni corto, ni perezoso, le digo
vamos. Allí me encontré con el cliente, se sorprendió; me dijo que su internet
estaba mal, por eso no llego a ver mis mensajes y que no había recibido ninguna
llamada mía. Le dije, no importa, solo le pido que me pague; por el trabajo que
he realizado y me dice, que ahora no tiene plata, que me espere hasta el sábado.
Waoooo, dije. Muy bien, yo le
espero, pero por favor no me vaya quedar mal, necesito ese dinero.
El cliente, me dice; no te
preocupes, a primera hora yo te deposito, el sábado.
Mery y Yan le pregunta — Y ¿Cuánto tiempo demoro en pagarte?
Alex riendo disimuladamente, responde — Más o menos, como en un
mes.
Me imagino, que le estaba yendo
mal en su empresa o que se consiguió alguien que le haga los trabajos más
baratos.
Mery con una sonrisa en el rostro
dice — Se ve que hemos pasado, por tantas
experiencias, como trabajadores freelance; que ya nada nos sorprende.
Yán y Alex, mueven sus cabezas,
como diciendo; que es verdad lo que Mery dice.
Alex, Mery y Yán miran a Henoc y
le dicen — Ahora solo faltas tú, anda Henos
cuéntanos una de tus experiencias.
Que les puedo decir, dice
Henoc — Todo lo que ustedes an vivido como
Freelances, yo también lo he vivido, que podría decir; para que aprendamos algo
de todo esto que estamos hablando. Podría ser, el respetar lo que ponemos; en
las cotizaciones, que hacemos por cada trabajo que nos solicita un futuro
cliente. He visto que muchos que trabajan como freelance, no respetan, lo que
an escrito en sus cotizaciones y eso está mal.
Lo digo, sin afanes de ser pesado.
Que respetemos los tiempos, los cambios y que VALOREMOS NUESTRO TRABAJO, no son
dibujitos, ni un trabajo que lo pueda ser cualquier persona.
Todos miran a Henoc y dicen —
Sí que estas serio.
Y se ríen todos.
Autor: Leonardo Obregon
Marchena
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